2023-06-23

En Ecuador, a 23 de junio de 2023.

El Proyecto LIFE SATEC, financiado por la Comisión Europea, impulsa el trabajo en red entre unidades especializadas en el delito medioambiental de Europa y de América Latina aunando el conocimiento y la experiencia de los profesionales de las redes EnviCrimeNet (Red Europea para el Crimen Medioambiental) y Jaguar (Red de Policías Especializados en Delitos Ambientales de América Latina y la Unión Europea).

Desde que la EMPACT (European Multidisciplinary Platform Against Criminal Threats) introduce la lucha contra el delito medioambiental como prioridad política contra el crimen organizado, las unidades policiales especializadas en este tipo de crímenes han reforzado sus capacidades a través de diferentes actuaciones: El diseño de acciones formativas adecuadas a las características cada vez más sofisticadas del delito medioambiental así como la gestión de actuaciones operativas entre diferentes países de la UE y fuera de ésta, especialmente con Latino América, ha sido una constante en los últimos años.

En un contexto como el que se presenta donde los delitos medioambientales convergen con otros tipos de delitos organizados (drogas, inmigración ilegal, etc.) y con una propensión cada vez mayor a utilizar comunidades más desfavorecidas para la perpetración de crímenes, es necesario reforzar el papel de los cuerpos especializados para conformar un modelo de investigación e intervención que considere aspectos no solo medioambientales sino también sociales con una importante implicación de otras especialidades delictivas.

El refuerzo de estas capacidades debe ser constante y global, de ahí que las redes que aglutinan estas especialidades en Latino América y Europa, la Red Jaguar y EnviCrimeNet, hayan llegado a establecer una línea de trabajo que recoge la formulación de estrategias de carácter conjunto que se ha hecho patente en la celebración de la Asamblea General de la Red Jaguar del año 2023 en las Islas Galápagos.

Estas estrategias responden a los grandes objetivos que se han planteado tales como:

  • El posicionamiento institucional de las Redes especializadas en el ámbito del crimen medioambiental a nivel nacional de los diferentes países integrantes y a nivel internacional en el contexto mundial, donde las prioridades medioambientales deben estar priorizadas atendiendo a la perspectiva de la investigación criminal para prevenir, detectar y castigar los delitos medioambientales.
  • La formación continua para adoptar procedimientos comunes en la investigación criminal.
  • La integración de otras disciplinas y conocimientos en la prevención y detección del delito.
  • La incorporación de la innovación como una constante para dar respuestas a unos delitos medioambientales cada vez más sofisticados.
  • La configuración de estructuras permanentes de trabajo, a modo de secretarías técnicas o ejecutivas, que den soporte a las actividades de cooperación de las redes.

En el transcurso de la Asamblea, se han expuesto diferentes experiencias en relación a las operativos e investigaciones del delito medioambiental, donde se han identificado también debilidades, especialmente relacionadas con el avance de la normativa, y que requieren de un la búsqueda de referencias de éxito y, especialmente, de la sensibilización política sobre la importancia de legislar atendiendo a la perspectiva de la investigación criminal.

En las intervenciones por parte de los especialistas asistentes se han destacado las importantes amenazas sobre la biodiversidad que representan las actividades delictivas ligadas al tráfico de especies, tala de árboles, actividades mineras, hidrocarburos.

Pero también se han abordado experiencias de éxito que impacta sobre los territorios más vulnerables y que parten de la colaboración multidisciplinar. Así, se destacó la cooperación por parte de las ONGs presentes (IFAW y WWF) con grandes marketplaces para la detección de delitos vinculados al tráfico de especies; acciones de autoevaluación que permiten conocer el nivel de concienciación política sobre el crimen medioambiental en los países, desarrollado por la UNODC; la identificación de Grupos Especializados en Materia Ambiental en cada país que permiten fortalecer la cooperación con Interpol; la combinación de innovaciones tecnológicas y de procedimientos participativos para combatir el tráfico de ilícito de vida silvestre en Ecuador; Modelos programáticos que revierten en la cooperación internacional y capacitación especializada como el plan TIFIES del Ministerio de Transición Ecológica de España; Proyectos piloto de reforzamiento institucional como el propio LIFE SATEC;

Cada uno de los países representados mostraron también sus principales problemáticas así como éxitos en sus intervenciones policiales o cambios estructurales y legislativos que repercuten en una mayor intercepción de delitos medioambientales, pero también abordando la prevención desde una perspectiva educativa y social.

Como acciones preparatorias a esta Asamblea, los representantes de la Red EnviCrimeNet (representados por SEPRONA, coordinador del Proyecto LIFE SATEC) y de la Red Jaguar han establecido reuniones de trabajo con instituciones del ámbito iberoamericano, como la Secretaría pro témpore ostentada por Ecuador para la celebración de la Cumbre Iberoamericana en el año 2024, y el Banco Interamericano de Desarrollo. Ello ha permitido la exploración de los instrumentos que puedan reforzar la labor de estas redes con alto impacto en la preservación de la riqueza natural de los territorios altamente vulnerables y amenazados por todo tipo de actividades delictivas.

Las unidades especializadas en delitos medioambientales presentes en la Asamblea General de la Red Jaguar representaron a los países de Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, Ecuador, España, Italia, Panamá, Portugal, Perú, República Dominicana y Uruguay.